Prótesis total de cadera

DEFINICIÓN 

La artroplastia de cadera, también conocida como prótesis total de cadera (PTC)

Es un procedimiento quirúrgico que reemplaza la articulación de la cadera, incluyendo el acetábulo (la cavidad de la cadera) y la cabeza del fémur. El cartílago y el hueso de esta articulación se han desgastado debido a la artrosis o a la enfermedad degenerativa de la articulación. El hueso debajo del cartílago empieza a desarrollar espolones, la cadera se deforma y estas irregularidades producen dolor, disminuye el movimiento y hay dificultad para caminar. 

 

Artrosis de cadera y prótesis total de cadera 

TÉCNICA QUIRÚRGICA 

Se realiza una incisión de unos 10 – 12 cms, alrededor de la articulación de la cadera. Normalmente, la incisión se realiza en la parte anterior o en la parte lateral de la cadera. Los músculos, los tendones, y la cápsula de la articulación se mueven de la articulación para exponer la cabeza del fémur y el acetábulo o cotilo. 

Durante la PTC, el cirujano realiza una serie de cortes sobre el cartílago y hueso dañado y remplaza la superficie articular dañada por una superficie hecha de metal y plástico de gran resistencia. 

Esta cadera artificial permite hacer movimientos completos en una articulación estable y no dolorosa.

Su cirujano puede elegir entre una gran variedad de prótesis existentes en el mercado, de acuerdo a que tan avanzada se encuentre su enfermedad y a otros factores como la edad, el peso, antecedentes médicos y el nivel de actividad de cada persona. 

Es muy importante entender que el sobrepeso y la obesidad son factores claramente negativos para la durabilidad de la prótesis.

 

TIEMPO DE RECUPERACIÓN 

0 – 2 SEMANAS: 

Después de la cirugía, lo recomendado es un ingreso hospitalario por 3 – 4 días, para controlar el dolor y cualquier complicación que surja en el postoperatorio inmediato. Aunque en algunos hospitales de Europa y Norte America el alta precoz con iguales resultados que el ingreso por 3-4 días (24 horas después de la cirugía) es cada vez más frecuente si el paciente cumple con varios requisitos incluidos en el protocolo de cada hospital. 

Algunos cirujanos suelen dejar un drenaje por un periodo de 24 – 48 horas, para prevenir la formación de hematomas dentro de la cadera (aunque no es necesario en todos los casos).

Después de retirar el drenaje o redón recuperador (si es su caso), luego se puede sentar y comenzar a caminar con la ayuda de unos bastones o de un carrito andador, según la preferencia y habilidad de cada paciente. 

Es normal experimentar cierto grado de inflamación y dolor, sobre todo durante este periodo inicial. Pero estos síntomas, no le deben desanimar para seguir caminando y realizando algunos ejercicios que se le enseñaran al alta hospitalaria.

Deberá evitar sentarse forzando la flexión de la cadera (para ello utilice cojines en las sillas y una cuña especial para el váter), al igual que cruzarse de piernas. Estas recomendaciones evita complicaciones como la luxación de la prótesis y deberán tenerse en cuenta sobretodo durante los 3 primeros meses. 

Se debe curar la herida quirúrgica y cubrirla con apósitos estériles cada dos días, hasta la retirada de los puntos o grapas, alrededor de la segunda o tercera semana.

Es muy importante utilizar una heparina de bajo peso molecular de forma subcutanea u otras sustancias autorizadas vía oral para evitar complicaciones serias como la trombosis. 


2 – 6 SEMANAS: 

Es normal experimentar todavía ciertas molestias.

También se debe ganar fuerza y tono muscular. En muchos casos varias sesiones de fisioterapia son necesarias. 

Al finalizar este periodo, debe caminar sin ayuda de bastones.

  

6 – 12 SEMANAS: 

Al finalizar este periodo el movimiento de la cadera debe ser cercano a la normalidad, al igual que la inflamación y el dolor deben ser mínimos.

El riesgo de luxación de prótesis disminuye, pero igualmente deberá evita posiciones forzadas de la cadera. 

No es necesario una revisión en este periodo, a menos que tuviera algún problema. 

 

3 – 6 MESES 

Es muy importante el no ganar peso extra, ya que el sobrepeso afecta negativamente a la durabilidad de la prótesis y la mecánica de la cadera.

Puede que experimente cierto dolor, después de largas caminatas. Esto es normal porque el organismo se debe adaptar a la prótesis y progresivamente hay que volver a  tener una buena condición física (probablemente antes de la cirugía no podía realizar mucho ejercicio debido al grado avanzado de artrosis y perdida de movilidad.

De todas formas no se desanime, ya que suele mejorar con el tiempo. 

Al finalizar el 6 mes la estabilidad de la cadera, el desarrollo muscular y la propiocepción deben ser normales. 

A partir de este momento, es recomendable controles anuales, para evaluar el estado de la prótesis.